martes, 13 de noviembre de 2012
Me la suda si follas o fallas.
Si estudias o prefieres trabajartelas. Si odias los domingos o si cuentas por ahí que yo estaba loca por ti. Si eres victoria o fracaso. Si te sigue faltando cerebro o te sigue sobrando de ahí abajo. Si bebes para divertirte o para olvidarte. No me han quedado cicatrices de la ostia que me pegaste, ni lugares, ni paisajes. Ni canciones que recordar, ni canciones para recordarte, tampoco películas, ni caricias. He aprendido la lección bien aprendida a base de palos y no me han quedado ganas de volver a verte, ni de noches, ni de mañanas, ni de carreteras, ni de coches. No me han quedado ganas de ti en general. Solo una indignación que es parecida a la resaca de los domingos y un poco de odio hacia todo lo que tenga que ver contigo. Soy una de las mejores cosas que han pasado por tu vida, demasiado buena para un amante de las mentiras y los te quiero falsos. Y cuando llegue el día en el que hagas un repaso de tu lista y sientas ese no se que porque yo ya no estoy en ella, me veras a años luz de esta pesadilla. Recordaras que yo soy la única que confió en ti, que te dio un voto de confianza, la única que creyó que tu eras algo mas de lo que dicen por ahí, una pena, me equivoque... Y ahora, que ha pasado tanto tiempo, que he sufrido tanto, que ya he llegado a todas las posibilidades. Ahora, tarde como siempre, me doy cuenta que tenia que pasar. Si no hubieras sido tu, hubiera sido otro. A mi, la idea de que alguien me dijera estas cosas me haría pensar si lo estoy haciendo bien, si valgo algo como persona, o si soy otro niñato al que cuando le den una buena ostia se relaje, y se pare a ver la realidad y se de cuenta, de lo que ha perdido, que lo único que tu tienes es fachada, por dentro estas acojonado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario